The first thing to aid is respect.
Ernesto Sirolli, alguien que participó en numerosos proyectos en comunidades de distintos países de África, explica por qué para ayudar hay que convertirse en sirviente de la pasión de los locales. Y deja que el mundo suceda, digo yo dando un paso más, recordando aquello que dijo Joe Bageant, donde quizás ya no haga falta ni siquiera la acción sino simplemente abrazar a otras culturas desde el entendimiento.