Nunca me importó que la felicidad durara poco. El paso de la dicha a la costumbre es una de las mejores armas de la muerte.
[Julio Cortázar, Los Premios, 1960]
Foto: Bones Jangles
desde la otra orilla
Nunca me importó que la felicidad durara poco. El paso de la dicha a la costumbre es una de las mejores armas de la muerte.
[Julio Cortázar, Los Premios, 1960]
Foto: Bones Jangles
Sí, pero lo que no se hace repetitivamente y se convierte en un hábito nunca llega a ser virtud, por lo que para ser un virtuoso hay que «acostumbrarse», a lo que sea. Cortázar se «acostumbró» a escribir con un ojo interior increíblemente despierto. Con ello consiguió la dicha de muchos, y la inmortalidad, escrito sea de paso.
estoy leyendo el libro y todavía no llegué a esa parte, así que no sé qué personaje lo dijo!
me encanta leer cosas de Cortázar que nunca antes leí. quedan pocas.
@amaliovilla
Los premios es muy bueno, fue su primera novela. Es un Cortázar cotidiano aunque con su cuota de encanto, y esa frase es una joya. Pero hay varias más. Disfrútalo, es cierto que quedan pocas pero para eso existe el releer… 🙂