Sí, sí, ya sé que el blog está abandonado. Pero tengo una excusa… y la voy a usar! Desde mayo, cuando comenzó la pesadilla Wanadoo, no tengo adsl. En lo que espero fueron los últimos capítulos de la historia, tuve que dar de baja mi línea de teléfono (sí, tengo nuevo número) y así poder contratar por fin con otro proveedor.
Desde ayer tengo banda ancha otra vez en casa. Creo. Explicar el creo consiste en decir que por extrañas cosas de la burocracia y por error de mi flamante proveedor (sin comentarios), me han habilitado el adsl sin haberme enviado el módem. Hasta que me lo envíen voy a usar mi router. Espero que no haya más incidencias para contar.
Todo esto para decir que a partir de ahora no tengo excusas. Aunque es cierto que me pasé todo el verano sin internet haciéndole fotos a las lámparas y ahora que tengo banda ancha otra vez estoy con la agenda completa.