Se acaba de publicar el último capítulo del documental de Play4Africa, ese maravilloso proyecto en el que tuve la suerte de participar por invitación de Shoe Aid for Africa y en un proyecto del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los refugiados, que me llevó 10 días por caminos de Namibia y Sudáfrica bastante difíciles de encontrar en los mapas.
Yo me incorporé en la última etapa, pero esta expedición había comenzado casi 4 meses antes en Túnez. Los expedicionarios recorrieron 11 países, donando material de ayuda humanitaria: redes mosquiteras, filtros para agua potable, zapatos y medicamentos. El documental que relata la expedición consta de 4 capítulos (pueden verse aquí: 1, 2, 3 y 4). También se están transmitiendo por La 2 de TVE y Teledeporte.
Durante las largas horas de conducción y en torno al fuego, los chicos nos contaban todas las anécdotas e historias de los países que habían visitado. A todos yo les preguntaba cuál había sido su país preferido de los que habían visitado; cada uno me decía uno distinto, y empezaban a desgranar relatos que duraban horas. Algunos de ellos están en el diario de a bordo que llevaban Leo y Patrik, y otros en el blog de RTVE, escrito por Estela y Ale.
Yo, ya en Madrid, mientras seleccionaba las fotos del viaje, vivía esas sensaciones otra vez. Veía a los niños africanos y sus ojos de adulto, recordaba el imponente silencio del desierto y me preguntaba si alguna vez terminaré de volver del todo de África.