Llevo tiempo escuchando que una herramienta mató a otra. Que Twitter mata blogs y come niños recién nacidos. Que desde que usamos twitter mucho contenido se destina ahí y no a los blogs, o que perdemos energía creativa/tiempo/productividad. (Ah perdón, ese es otro tema). Pero ya me entienden, Twitter versus blogs.
JJ Merelo, a raíz del último BYMC, planteaba algo de esto en un post:
¿Cabe todo lo que hay que contar en uno o 20 tuits? El problema es que por mucho que uno intente ser cazador bizco no se puede apuntar a todos sitios. Si estamos a tuit, estamos a tuit, si estamos a blog, estamos a blog. La twittersfera está dispersa y es efímera, y le falta análisis, contexto y reflexión. La blogosfera tiene de todo eso, pero necesita más tiempo.
Sinceramente, creo que ni lo uno ni lo otro. Twitter no mata a ninguna blogosfera (suponiendo que existe una) porque blog y twitter son más bien complementarios. Es como decir que el email matará al teléfono.
Estamos planteando mal la pregunta desde el principio. He visto tweets más sabios que páginas y páginas de blogs. He participado y leído conversaciones en Twitter más brillantes que muchos sesudos análisis que leo en posts interminables, mientras que a la vez leo blogs que nunca cambiaría por mi lista de tweets favoritos, escribo cosas en mi blog que no quiero ni me interesa desglosar en 20 tweets. No tiene nada que ver. Si hay blogs que no explotan su potencialidad comunicativa, si hay tuiteros aburridos en tu timeline, si creemos que los blogs están muertos sólo porque vemos más inmediatez en twitter, es porque algunos lo hacen mal y otros bien, y unos manejan mejor una herramienta que la otra.
Desde mi experiencia, twittear es una forma completamente nueva de comunicación, que permite una instantaneidad, una impulsividad y unas conexiones que no las ha logrado el blog, aunque el blog permita otras cosas, otro análisis y otros tiempos muy propicios para la reflexión.
Todo el liveblogging (tuitear en otras palabras) que se hizo o se pudiera haber hecho desde el BYMC (sustitúyase esto por cualquier otro evento) no sustituye a los posts que se pudieran escribir, ni éstos sustituyen al liveblogging. El hecho de que alguien esté transmitiendo en Twitter en ese momento permite comunicación entre los que estábamos ahí y los que no, comunicación instantánea y valoración inmediata de lo que se escucha. El hecho de tener más información en ese momento por parte de otros que están escuchando lo mismo que tú, te da más elementos para un análisis inmediato.
Yo estuve bastante pendiente de lo que se decía desde el micrófono del BYMC pero también entre los que escuchábamos. El blog no funciona de la misma manera como un backchannel. Con un blog esas voces pueden ganar en profundidad de análisis, pero muchas cosas se pierden, muchas impresiones y sensaciones que tuviste en ese mismo momento, mientras escuchabas, ya no las recuerdas al momento de escribir un post, y tampoco tienes replies de tus contactos contestándote, agregando información en ese mismo momento.
Tampoco es útil hacer lo contrario: pretender que con Twitter basta, hacer un rejunte de tweets y pegarlos todos en un blog. Quizás echemos en falta un análisis, un resumen, una valoración de conjunto: ahí está el blog, ahí está nuestro espacio personal para volcarlo. En este BYMC, por estar en el SICARM, llegué sólo para presenciar la segunda jornada, y por tanto no sentí que tenía información como para hacer un análisis o un post más completo sobre el BMYC. Mi post no pretendía ser un resumen, sino dejar en un sólo sitio algunos enlaces y mis impresiones posteriores. En ese sentido, si estamos comparando, me parece un mal post, y vi varios tweets mucho más valiosos que mi post, porque agregaban más información, porque permitían una conversación en ese mismo momento, porque eran parte de esa chispa que surge sólo en el transcurso del diálogo.
Creo que el problema empieza cuando intentamos meter en una sola etiqueta fenómenos comunicativos que son nuevos, que están cambiando tan rápido que no nos dan tiempo a ver la perspectiva total. Hablar de twittersfera y de blogosfera empobrecen muchísimo nuestra visión de todo lo que está pasando en internet en estos momentos en materia de comunicación. ¿Por qué no hablar también de Compartidos-en-Google-Readersfera? Os puedo asegurar que ahí pasan muchas cosas también. Las herramientas son muchas y lo bueno es que estamos usándolas para distintas cosas, para las mismas, pero establecer un límite no nos ayuda a entender una conversación social que cada vez se extiende más.
Foto: Ferminius