Todos los alumnos que estudien o hayan estudiado en una Escuela Oficial de Idiomas ven bajar la categoría de sus diplomas.
Tengo actualmente dos de estos diplomas devaluados. Hablo inglés desde pequeña pero dí el examen final en la EOI hace tiempo. También saqué el diploma básico de neerlandés, idioma en el que estoy en cuarto año. Me gusta la EOI por la comunidad de personas que están en ella y porque da la oportunidad a todos de estudiar un amplio espectro de idiomas, en muchos casos con poquísima oferta educativa.
Este año, tanto alumnos como profesores estamos shockeados por algo que se ha decidido desde el Ministerio: los centros públicos tendrán una categoría menor a la de los centros privados.
Estuve hablando con Juanjo, un amigo y compañero de neerlandés y representante de alumnos. Me cuenta que las Escuelas Oficiales de Idiomas, los únicos centros de estudios de idiomas públicos de España, hasta el año pasado daban una enseñanza que preparaba al alumno para tener un uso competente del idioma, lo que era cercano al nivel C del Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas.
Con el desarrollo de la Ley Orgánica de Educación (LOE), las administraciones educativas se han perdido la oportunidad de homologar esta situación oficialmente. Al no haberlo hecho, se recorta la posibilidad de llegar al nivel más alto del aprendizaje, que el Consejo de Europa define como el más adecuado para el acceso de estudiantes y profesionales a becas y ofertas profesionales en cualquiera de los países de la Unión Europea.
Entonces, quienes quieran obtener una certificación de los niveles más altos de aprendizaje de un idioma, tendrán que acudir a instituciones privadas o extranjeras. Desde España, ningún centro de enseñanza público podrá certificar los niveles superiores, y tampoco enseñarlos en las aulas: el nuevo plan de estudios para EEOOII publicado por el MEC y desarrollado por la Comunidad de Madrid sólo llega al nivel B2 de los 6 (A1 y A2, B1 y B2, C1 y C2) reconocidos por Europa.
Alumnos y profesores han montado respectivos blogs, y están movilizándose para que las autoridades educativas les escuchen, pero no hay resultados demasiado alentadores por el momento, según lo que me cuentan.
En los discursos políticos el tema del bilingüismo llena muchos espacios, pero luego nadie oye a quienes forman parte de unas escuelas que enseñan no sólo inglés, sino 21 idiomas más, desde cero hasta el nivel más alto de competencia lingüística (hasta ahora, claro).