Chiquita

marilin

Las fotos antiguas tienen esa dimensión mágica de trasladarnos, de hacernos encontrar con la persona que fuimos y preguntarnos qué nos diríamos si coincidiéramos en espacio y tiempo, con ese otro que sigo siendo yo. Yo lo he pensado muchas veces; es extraño y también fascinante sentir que una ha cambiado muchísimo, ha vivido muchas vidas, y aun así sigue siendo la misma.

A los 3 años me tomaron esta foto, y es la que elegí a pedido de Dave, que tiene un blog, Fotos de Tiempos Pasados, donde colecciona justamente eso. Me escribió para pedirme una, que publicó con mis respuestas a dos preguntas que me hizo:

¿En el tiempo que fue tomada la foto que pensabas a lo que te dedicarías a la edad que tienes ahora?

– Ni ahí, ni durante varios años después se me hubiera ocurrido que iba a dedicarme a todas las cosas que me dediqué después. Al año siguiente a esa foto, cuando tenía 4, aprendí a leer, y prácticamente no he parado desde entonces. Creo que también surgió lo de escribir y por eso la gente me preguntaba si iba a ser periodista, pero me acuerdo que quise ser mil cosas antes de eso: astronauta, actriz, fotógrafa, entre otras.

¿Un deseo para el futuro?

– Que el futuro siga siendo siempre ese lugar donde las esperanzas superan a los pronósticos negativos… que haya lugar para la creación, para el desarrollo libre de las capacidades de todos, y esto tanto para mí como para el resto de seres del planeta. Que cada uno pueda hacer lo que quiera, que se anime a explorar y que el miedo no ocupe tanto lugar.

Hablando (de más) en el SICARM

Esta semana estuve en el SICARM, IX Foro Anual de la Sociedad de la Información en Murcia dando una charla en el marco de las Jornadas de Periodismo Digital sobre Redes Sociales y Nuevos Perfiles para Comunicadores. El tema fue propuesto por Sergio M. Mahugo, a raíz de una charla de café que tuvimos hace unos meses donde le comentaba que para los comunicadores que se atrevan a ampliar la visión sobre su campo hay mucho por hacer en el ámbito de internet. A Sergio le gustó que yo le dijera que un community manager por ejemplo es un gran comunicador, pero yo, que creo cada vez menos en las etiquetas, les hablé de buscar su propio camino profesional y cosas como ésas, que no tienen instrucciones de uso.

Como todo aquél que va creyendo que puede enseñar algo a alguien, aprendí mucho más y disfruté muchísimo con el turno de preguntas y las charlas con los alumnos fuera en los pasillos. Una palabra que se repite mucho en la boca de los estudiantes hablando del futuro y de la profesión es miedo. Yo les pregunté si creían que yo no tenía miedo todos los días o ante cada nuevo proyecto. ¡Claro que me muero de miedo!. Pero si yo hubiese permitido al miedo quedarse más de dos segundos probablemente ni siquiera estaría escribiendo esto, ni hubiese hecho las cosas más apasionantes de mi vida.

Hubo unos problemas con el conector y no pude usar mi ordenador. Las diapositivas no se vieron del todo bien y hablé más de lo que había en el guión, aburriendo terriblemente a toda la sala, pero si alguien insiste en mirar el vídeo, pueden encontrarlo aquí, y ver cómo no hay que hablar de la inexistencia de la objetividad periodística cuando estás invitada para hablar de otra cosa.

Un tema recurrente fueron las emociones en cuanto a los diferentes medios utilizados y la habilidad del periodista para entenderlas y hacer mejor su trabajo. Surgió el tema tanto en mi charla como en la de Arturo Merayo, que me gustó mucho y que a todas luces maneja el powerpoint mejor que yo.

La organización del SICARM ha sido impecable. Sería bueno que  en las próximas ediciones haya más espacio para la parte de Periodismo Digital, porque actualmente el evento está más dedicado a otros temas más tecnológicos. A modo ilustrativo, a la hora de las comidas, las mesas más numerosas estaban llenas de señores con corbatas, seguía un estilo fashion en la mesa de los animadores e ilustradores (la sección dedicada a animación digital es importante) y en la de los periodistas digitales, nosotros, desentonábamos estrepitosamente con el resto.

Coincidimos allí con algunos colegas, José A. Gelado, Jesús Gordillo y Pau Llop entre ellos, (también por supuesto mi querido Sergio Mahugo que tuiteó mi ponencia (1 con foto, 2, 3, 4) y fue de los primeros en levantar mano cuando pregunté quién tenía twitter). Las horas se me pasaron volando. De allí me fui a Granada, donde no quise perderme la última jornada del Blogs y Medios (va en otro post). Algunas fotos rápidas de Murcia han quedado en este set de Flickr.

Global panic anyone?

Sólo para mantener la perspectiva: más de 4 mil personas morirán en África de SIDA hoy y 2 mil niños serán infectados. ¿Alguien quiere pánico global?

Esto dicho en el medio de la paranoia de la gripe porcina, medios exagerando la situación y la palabra pandemia repetida hasta el infinito.

Mc Cain como el Joker

¿Realmente parezco un tipo que tiene un plan? ¿Sabes lo que soy? Soy un perro persiguiendo coches. No sabría qué hacer con uno si lo alcanzara.
¿Sabes? Yo sólo hago cosas.

(El Joker en El Caballero Oscuro)

La foto que ha estado rodando en varios tumblrs se pierde algo del contenido de un excelente artículo sobre Mc Cain. Ante la crisis de Wall Street, la actitud serena de Obama ha sido criticada, mientras que Mc Cain ha «suspendido» su campaña, yendo sin embargo a un show de tv, viajando a Washington, cuestionando el bailout para finalmente no decir demasiado sobre el tema. Mientras su campaña política trata de proteger a Sarah Palin de dar demasiadas declaraciones propias a la prensa, después de haber creado una evidente figura mediática off y online.

El análisis de la Historia, con mayúsculas, en estas épocas, ha sido desplazado por períodos cortos de atención, pero aún así, dice el autor, no necesitamos irnos más lejos hacia atrás que la última película de Batman.

Una ciudad se ve conmocionada más que nada por el juego de eventos impredecibles y diabólicos causados por el Joker. Autoridades, hombres honestos y héroes no pueden salir del juego y se convierten en víctimas cómplices. Ciudadanos y audiencia buscan estabilidad para lograr algún tipo de comprensión de lo que está sucediendo.

Comodines, especialistas políticos, trucos, mentiras a alto nivel y desinformación: el autor se pregunta si sería muy duro definir el comportamiento errático de Mc Cain como un tipo de terrorismo de gama baja, un friendly terrorism. No lo sé, pero en lo que sí estoy de acuerdo con él es que un candidato presidencial debería proveer una salida, una solución, un plan. Justo lo que siguen sin hacer Palin y cía.