Los hijos, internet y móviles

Una madre escribe un supuesto contrato que ha hecho para que su hijo firme al regalarle un móvil y gracias a los miles de padres preocupados (pero en mi opinión no ocupados en aprender qué es y cómo funciona internet), el post se hace muy leído, y arrecian las opiniones a favor y en contra. Ayer compartí en Twitter lo más sensato que leí sobre el tema:

No hay forma de tener todo bajo control, aunque se hagan muchos esfuerzos en minimizar errores, sólo podemos evitar los más leves, pero los importantes son inevitables. ¿Queremos formar a personas que piensen que son todos evitables? ¿Que se puede controlar todo en nuestra vida? ¿Que por defecto debemos debemos desconfiar de otras personas? ¿Que sean incapaces de superponerse a las cosas malas que seguro nos ocurrirán?

Léanla completa en el post original.

Foto: toehk

Comienzo en eldiario.es

Ha sido una semana montaña rusa, como me tocan a veces. El lunes pasado presenté la renuncia a mis funciones en Hipertextual, después de pensarlo durante bastante tiempo. Ha costado porque dejo allí muchas horas de sueño, satisfacciones profesionales, amarguras y buenos amigos.

Debería decir que el año ha sido más montaña rusa que la semana. 2012 trajo cambios brutales en mi vida personal y profesional, a los que no hubiera podido sobrevivir sin esas personas que siempre están cerca mío, aunque no hagan ruido. Sabéis quiénes sois. No sé cómo deciros GRACIAS.

A partir de mañana me incorporo al equipo de Eldiario.es como Jefa de Producto. Mi objetivo es ayudarles a desarrollar un proyecto con el que me identifico desde que nació: un medio digital que apuesta por la honestidad informativa a pesar de todo. Hay tanto talento en el equipo que me siento muy honrada con la oportunidad que me dio Nacho y el apoyo de sus socios. Estoy, literalmente, viviendo un sueño, y preparándome para uno de los desafíos profesionales más ilusionantes de mi vida.

Mañana empieza todo.

Gobernanza: que no signifique una internet cerrada

Me resulta sumamente difícil empezar a imaginarme cómo podría haber sido mi vida sin internet. Cómo podría haber sido la vida de casi todas las personas que conozco. Simplemente, seríamos otros. No hubiera podido aprender tantas cosas, conocer tantos lugares, personas, códigos. Probablemente no hubiera podido comunicarme tan seguido con gente que amo, no hubiera viajado tanto, no me hubieran interesado los idiomas, y desde luego, no hubiera escuchado ni la décima parte de la música que he disfrutado.

Internet nació libre. Nunca perteneció a nadie, nunca tuvo una autoridad, nunca tuvimos que pedir permiso a nadie para crearla, para extenderla. Sus protocolos, son por naturaleza, abiertos, y por eso fue tan fácil construir, de un modo colaborativo, la maravillosa red de redes que tenemos hoy. Porque en internet descubrimos que si los que destruyen son 10, los que construyen y arreglan y ayudan y comparten son miles y millones. La red ha permitido que numerosos cambios sociales y políticos hayan sido posibles, que las injusticias sean conocidas y denunciadas, y que la libertad de expresión pueda seguir existiendo en este mundo de corruptos y burócratas.

A causa de eso, desde hace bastante tiempo se viene hablando de la gobernanza de internet como el desarrollo y la aplicación de principios, normas, reglas, procedimientos de adopción de decisiones y programas que configuran la evolución y el uso de internet.

Al principio estas cuestiones se limitaban más bien a lo técnico, cuestiones como por ejemplo los identificadores de dominios y direcciones IP y protocolos y parámetros manejados por la ICANN. Pero en 2005, en la Cumbre Mundial de la Sociedad de la Información en Túnez, se estableció el Internet Governance Forum (IGF), y desde ese entonces se ha abierto a una serie más amplia de cuestiones relacionadas a políticas en torno a internet, incluyendo la cuestión de si tiene que haber un control en una red que se ha desarrollado en ese fabuloso estado de caos fecundo.

Es tan natural para nosotros pensar que internet es un espacio de libertad que por obvio se vuelve invisible. ¿Qué pasaría si mañana Internet estuviera regulada por gobiernos? ¿Qué pasaría si esos mismos señores que hacen las leyes Sinde, SindeWert, Lleras, Hadopi, SOPA, PIPA, ACTA, se reunieran a puertas cerradas a tomar decisiones que afectan nuestro acceso a la red, sin consultarnos?

Y en 2012, el año de los mayas, esa reunión ya ha sido convocada. El próximo 3 de diciembre, una organización llamada Internet Telecommunications Union (ITU), la más antigua perteneciente a la ONU, ha convocado en Dubai a 193 países para definir el futuro de internet. Sí. Sin consultarnos.

La ITU trabaja con propuestas que no están expuestas a la luz pública, donde cada país tiene un voto, pero las votaciones se harán a puerta cerrada. Quienes usamos internet sólo nos enteraremos de las resoluciones cuando hayan sido tomadas. Algunas de las propuestas que ya han sido presentadas hablan de:

  • Cortar el acceso a internet por muchos motivos, muchos de ellos que van contra derechos humanos

  • Dar más poder a los gobiernos para que puedan monitorear el tráfico de datos de sus ciudadanos y tengan derecho a bloquear cualquier tipo de contenido

Internet ha sido posible gracias a su apertura, a su pragmatismo y su forma de funcionar, desde abajo hacia arriba (bottom-up governance). Es importante que reaccionemos y hagamos ver a estas personas que no estamos dispuestos a que se tomen decisiones sin escucharnos. La ITU ha empezado por poner los documentos de la World Conference on International Telecommunication en la red para que podamos consultarlos. Pero es necesario seguir atentos a las decisiones que se tomen.

Hay varias formas de actuar. Google ha iniciado una campaña llamada #freeandopen donde explican todo esto mediante un video:

Puedes visitar la página de la campaña Take Action, y dejar tu mensaje.

O entrar en Protect Internet Freedom y dejar tu firma.

O mostrar el video de la ITU a todo el mundo, para que sepamos lo que está en juego.

O seguir informándote, buscando información y contándolo a otros para que todos podamos dejar en claro a nuestros gobiernos que queremos ser escuchados, porque internet es como el agua y la luz: de todos. Y tiene que seguir siendo así.

Comparativa: WhatsApp vs. GroupMe vs. LINE

Los SMS han muerto. O no, pero casi, porque nadie con plan de datos deja de tener instalado en su móvil una o varias aplicaciones de mensajería que además de ser gratuitas, incorporan cada vez más opciones para poder estar comunicados a todo momento con nuestros contactos sin gastar en SMSs ni llamadas. Y digamos la verdad, son mucho más divertidas: permiten incluir dibujos, geolocalización, mandarnos fotos y chatear en grupo. Lo mejor es que hay muchas y cada vez tenemos más opciones para elegir. Hace poco aquí en Bitelia reseñábamos LINE, la mensajería que vino de Japón y como gustó a muchos de nuestros lectores, queremos compararla con otras opciones similares: WhatsApp y GroupMe.

WhatsApp-Line-y-GroupMe-e1352973801963

Disponibilidad y precio

Las 3 aplicaciones son multiplataforma, o mejor dicho, tienen versiones para funcionar en los sistemas operativos móviles más usados: Android, iOS, BlackBerry y también Windows Phone. WhatsApp, además, funciona en teléfonos con Symbian y Java2ME.

En las tres es gratuito enviar mensajes, es decir, no se contabilizan los mensajes enviados ni se cobra por eso, todo corre sobre el plan de datos que tengamos. GroupMe y LINE se pueden descargar sin ningún coste, y WhatsApp también para todos los sistemas operativos exceptuando iOS. Podemos descargarla gratuitamente desde iTunes y usarla un año sin pagar, pero advierten que cuando el segundo año se cumpla, tendremos que pagar una cantidad que no llega a un euro. De todas maneras, al llegar al año, al instalarla otra vez, el contador empieza desde cero y no pide el pago. Es decir, en la práctica, las 3 son gratuitas.

Además de las aplicaciones móviles, LINE es la única de las 3 que tiene un programa nativo para usar en el escritorio, tanto para Mac OS X como para Windows. GroupMe puede usarse directamente desde la web.

Seguridad y estabilidad

Las tres son bastante estables, WhatsApp ha tenido algunas caídas y suele seguir teniéndolas de vez en cuando pero en general es estable. La web de GroupMe suele ser un poco inestable y no actualiza bien regularmente, por lo que muchos son los que prefieren usarlo desde el móvil.

Desde el principio de los tiempos hay muchas dudas sobre la seguridad de WhatsApp, y sus fundadores nunca se mostraron transparentes con respecto a las sospechas que generaba la aplicación. Desde agosto de este año finalmente recibió una actualización que cifra los mensajes, pero no habría que usarlo para ningún mensaje que contenga información sensible sobre temas delicados o muy privados, como tampoco a GroupMe o a LINE, que también tuvo acusaciones de la existencia de agujeros de seguridad que permitían ver los mensajes.

Características: lo mejor y lo peor de cada una

WhatsApp es el rey de la mensajería en cuanto a popularidad. Al ser el primero multiplataforma logró juntar una base de usuarios que sigue creciendo mundialmente. La compañía no revela números, pero en marzo de este año pudo conocerse que en España 10 millones de personas lo han descargado en su móvil. Esto significa sobre todo que en aplicaciones de mensajería, al final te interesa estar donde la mayoría de tus contactos están, y por eso sólo, WhatsApp es un imprescindible en tu móvil. Lo peor de WhatsApp siempre han sido las dudas que generaban, aunque esto también ha empezado a cambiar después de que decidieran cifrar los mensajes.

GroupMe, como su nombre lo indica, está orientado a grupos, y este es su punto fuerte. Permite, no obstante, mandar mensajes directos dentro de un grupo o también mandar mensajes a cualquier contacto individualmente. La opción de poder acceder a través de la web también es muy útil para organizaciones o grupos de trabajo. Tiene un muy buen sistema de notificaciones por medio del cual podemos silenciarlas durante la cantidad de horas que fijemos. Su desventaja es que aún poca gente la tiene, y que su web no es muy estable.

LINE es la alternativa más nueva de las tres, y sus 49 millones de usuarios en el mundo lo avalan. La aplicación va muy bien tanto en el móvil como en la web, y otra de sus ventajas también es la posibilidad de usarlo desde el escritorio. Al permitir llamadas gratuitas entre usuarios via VoIP (que funcionan muy bien) es una opción interesante para tener instalada. Sus stickers y lo divertido que es usarlos hace que tenga una gran acogida entre nuevos usuarios, sobre todo jóvenes, aunque aún es un desconocido en España, y esto por ahora, es una de sus desventajas al momento de usarlo.

Este post fue publicado por mi originalmente en Bitelia.

 

 

Cómo lidiar con stalkers o acosadores en redes sociales

Siempre hubo acosadores en este mundo pero con la dimensión de internet estos términos cobran otro sentido. La comunicación a través de las redes sociales es diferente y nos hace repreguntarnos qué es realmente un stalker, hasta qué punto debemos tomarlos en serio y cómo podemos protegernos de manipuladores psicológicos en el ámbito de internet.

El stalking es una forma de acoso, pero los acosadores en redes sociales no tienen por qué serlo también fuera de ellas, aunque pueden provocarnos el mismo sufrimiento y son iguales de reales. En ambos casos somos víctimas y podemos actuar para salir de una situación asfixiante, pero hay que saber cómo hacerlo.

¿Qué es un stalker (o un acosador)?

Acosar consiste en tener una conducta persistente hacia una misma persona con el objeto de tener control sobre ella. Los stalkers tienen un comportamiento obsesivo y causan un sentimiento angustiante a la persona perseguida, que teme por su integridad. Un acosador puede meterse contigo o con tus seres queridos. Quieren aislarte socialmente y hacer que sólo le dediques atención a él.

Hay muchos tipos de acosadores, y la atmósfera de miedo psicológico que pueden provocar en sus elegidos es tal que puede ser difícil que se den cuenta si están en una situación de stalking o acoso a través de internet.

Por otro lado, es normal querer saber más sobre personas que conocemos, y en internet, como en nuestra sociedad, hay de todo: curiosos, celosos y stalkers. La persona que ha visto absolutamente todas tus fotos de Flickr o que da Like a todos tus posts no tiene por qué ser un stalker, sino simplemente un conocido que quiere saber más de tu vida.

La situación cambia cuando sientes miedo, cuando te sientes intimidado, cuando la situación se torna repetitiva y ves signos de obsesión. Es en ese punto donde es bueno considerar una serie de cosas para saber si ha llegado el momento de actuar para protegerte. Veremos una serie de pasos para saber cómo manejar una situación así.

Qué considerar

Reconocer la situación y tomar perspectiva

Una de las cosas más difíciles puede ser darnos cuenta de que efectivamente estamos siendo acosados. Primero tenemos que advertir que no porque alguien te siga en todas las redes sociales es un stalker, los amigos claramente no lo son y nuestras madres entrarían de cabeza en esta definición de stalkers si solamente tuviésemos en cuenta esto, cuando obviamente no lo son.

Nuestra exposición en redes sociales hace que muchas veces otros se puedan sentir muy cercanos a nosotros, se sientan «amigos», pero eso a veces no es compartido por nosotros, y ahí entra una sensación un poco rara, donde sentimos que alguien desconocido nos conoce demasiado. Pero esto no tiene por qué ser signo de stalking. Empecemos por no volvernos paranoicos y tratar de entender los motivos del otro: si un viejo conocido quiere ver todas tus fotos o te pregunta por tu vida, eso no lo hace un acosador.

Observar hacia fuera y hacia dentro

Hay varios signos que definen actitudes obsesivas hacia una persona en internet, como por ejemplo: monitorea constantemente tu actividad en la red, habla de ti como si tuviéseis una relación importante, te manda emails, mensajes y Whatsapps de forma insistente, o deja comentarios en tu Facebook repetitivamente y sin que tú correspondas ese nivel de intensidad.

Pero también debes observar los signos hacia «dentro» y preguntarte si te estás sintiendo intimidado por sus acciones. Si te estás sintiendo agobiado o incómodo con la situación, entonces ya es razón suficiente para actuar y cambiarla.

Hablarlo

Esta es una decisión complicada porque si el stalking es obvio y amenazador lo mejor es cortar todo tipo de contacto inmediatamente y sin dar ningún aviso, bloqueando, cerrando perfiles o lo que sea necesario para alejarse de esa persona.

Si no es la situación, o si son personas conocidas o amigos y no te estás sintiendo amenazado, intenta responder en forma medida. Existe la posibilidad de que hayas malinterpretado a la otra persona o sus motivos. Háblalo y hazle ver claramente que su nivel de actividad en tus publicaciones es excesivo y que te parece inadecuado.

No respondas o responde corto

No contestes a sus comentarios o a sus Likes, probablemente quiera llamar tu atención, pero no le des el gusto. También puedes contestar corto, poniendo algo que simplemente demuestre que has visto su mensaje pero que no le das demasiada importancia.

Bloquéalo

Hasta aquí veníamos de buenas, pero si su actitud persiste, no lo dudes y bloquéalo sin pensarlo más. Puedes hacerlo de dos maneras, avisándole o no. Mi opinión es que no hay que avisar, pero tú debes elegir lo que te parezca mejor de acuerdo a la situación. Para bloquear a alguien en Twitter, puedes hacerlo desde su perfil, activando la opción, pero en ese caso, aunque ya no reciba tus actualizaciones en su timeline, el stalker podrá ver de igual forma a tus tweets entrando por web a tu página si tienes la cuenta abierta. Si la tienes cerrada con candado, no.

En Facebook puedes bloquear a una persona yendo a su perfil y también es conveniente que revises tu configuración de privacidad.

Cuéntalo a otros

Y busca ayuda. Es recomendable que cuentes a tus amigos lo que te está pasando, porque por un lado pueden darte más perspectiva, ayudarte a tomar acción o ayudarle a la otra persona a entender que debe dejar de hacer lo que hace.

Pasa al plan B: denuncia

Si la situación va más allá de todo esto y realmente te sientes amenazado, humillado, acosado o vives con miedo debido a la acción de alguien en redes sociales, de lo que esa persona ha publicado o la forma en la que se relaciona contigo, pasa por alto todos los puntos, no le des más vueltas y habla con la policía. Guarda capturas de pantalla de todo, guarda los emails y muéstraselos. Explícales todo lo que ha pasado e indícales cómo te sientes. Reporta a la policía cualquier tipo de actividad sospechosa, no importa si no tienes pruebas sólidas, es bueno que estén advertidos.

Es buena idea llevar un registro o un diario con todo lo que pasa, esto te ayudará a juntar pruebas ante las autoridades si tienes que denunciar y además evitarás perderte en pensamientos con la sensación de «todo está en tu cabeza» que otros pueden hacerte sentir.

Foto: Truthout.org

Este post fue publicado originalmente por mí en Bitelia.

Twitter suspende la cuenta de un periodista crítico con la NBC: ¿censura?

#NBCfail

Muchas son las voces que acusan a Twitter de ejercer censura al haberse sabido que suspendió la cuenta de Guy Adams, un periodista de The Independient, después de que criticara en varios tweets la cobertura de los Juegos Olímpicos.

El corresponsal en Los Ángeles para el periódico británico The Independient se quejó en Twitter de que la NBC retrasara 6 horas la transmisión la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de Londres para que coincidiera con el horario prime-time en Estados Unidos.

America’s left coast forced to watch Olympic ceremony on SIX HOUR time delay. Disgusting money-grabbing by @NBColympics

(La Costa Oeste de Estados Unidos se ve obligada a ver la ceremonia de los Juegos Olímpicos con SEIS HORAS de retraso. Desagradable forma de ganar dinero por parte de @NBColympics)

I have 1000 channels on my TV. Not one will be showing the Olympics opening ceremony live. Because NBC are utter, utter bastards.

(Tengo 1000 canales en mi televisor. Ni uno solo muestra la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos en vivo. Esto es debido a que la NBC son unos hijos de puta totales)

Adams también volcó sus críticas en un artículo para su periódico, publicado hoy titulado As America succeeds at the Games, back home all the talk is about #NBCfail («Mientras Estados Unidos triunfa en los Juegos, en casa de lo único que se habla es de #NBCfail»). En él calificaba a la cobertura de ridícula, se sumaba a los usuarios que durante todo el fin de semana habían hecho de #NBCfail un trending topic y comentaba:

At the centre of controversy was NBC’s attempt to leverage maximum revenue from the Games, for which they paid almost a billion dollars, by foregoing live coverage of high-profile events. Instead, it intends to footage on time-delay during evening prime time, when brands will pay a premium to advertise. The tactic may very well be the most lucrative for NBC, but it’s the least satisfactory for viewers, and seems to blithely ignore the advent of the internet era.

(En el centro de la controversia estaba el intento de la NBC de sacar el máximo rédito de los Juegos, por lo que pagaron casi mil millones de dólares, renunciando a la cobertura en directo de eventos de alto perfil. Por el contrario, intentan enviar las secuencias con retraso durante el primer tiempo de la tarde, cuando las marcas pagan un extra para publicitarse. La táctica puede ser efecto muy lucrativa para la NBC, pero es la menos satisfactoria para los espectadores, y parece ignorar alegremente el advenimiento de la era de Internet.)

Un poco después de escribir este artículo el domingo, Adams fue a revisar su cuenta de Twitter y se encontró con que estaba suspendida. La sorpresa llegó el lunes cuando Twitter contestó con un email donde una respuesta aparentemente automática le notificaba que su cuenta había sido suspendida por publicar información privada de un individuo, como su email privado, y a continuación estaba una copia de uno de sus tweets:

The man responsible for NBC pretending the Olympics haven’t started yet is Gary Zenkel. Tell him what u think! Email: Gary.zenkel@nbcuni.com

La NBC por otro lado, emitió un comunicado declarando que habían formulado una queja a Twitter porque uno de sus usuarios publicó información personal de uno de sus ejecutivos. Twitter hasta el momento no se ha pronunciado públicamente sobre estos hechos.

Adams escribió un email a la PR de Twitter en Europa:

Hi Rachel
They’ve dealt with this (see below). Would you mind if I give you a quick call to discuss? I’m of course happy to abide by Twitter’s rules, now and forever. But I don’t see how I broke them in this case: I didn’t publish a private email address. Just a corporate one, which is widely available to anyone with access to Google, and is identical to one that all of the tens of thousands of NBC Universal employees share.
It’s no more «private» than the address I’m emailing you from right now.
Either way, quite worrying that NBC, whose parent company are an Olympic sponsor, are apparently trying (and, in this case, succeeding) in shutting down the Twitter accounts of journliasts who are critical of their Olympic coverage.
Am I to presume, for example, that they decided to complain about me because of my recent article in the Indy’s news page about their various failures? (see link)

http://www.independent.co.uk/sport/olympics/news/as-america-succeeds-at-the-games-back-home-all-the-talk-is-about-nbcfail-7986147.html

And if so, isn’t it a bit rum that they succeed in shutting down my account?
Either way, thanks for expediting all of this.
Yours &c
Guy

Donde básicamente Adams pide comunicarse con ella y hace constar lo siguiente:

Estoy, por supuesto, feliz de cumplir con las reglas de Twitter, ahora y siempre. Pero yo no veo cómo las he incumplido en este caso: yo no he publicado una dirección de correo electrónico privado. Sólo una de empresa, que está ampliamente disponible para cualquiera con acceso a Google, y es idéntica a todas las decenas de miles que tienen los empleados de NBC Universal.
No es más «privado» de la dirección que te estoy enviando un correo electrónico desde ahora mismo.
De cualquier manera, es muy preocupante que la NBC, cuya empresa matriz es un patrocinador olímpico, está tratando aparentemente (y, en este caso, teniendo éxito) de cerrar cuentas de Twitter de periodistas críticos con su cobertura de los Juegos Olímpicos.
¿Debo suponer, por ejemplo, que decidieron quejarse de mí debido a mi reciente artículo publicado en la página de noticias de The Independient acerca de sus fracasos?

La situación es bastante seria porque desde que Twitter se define y va camino a desprenderse del papel de red social, para convertirse cada vez más en un «medio», las acusaciones de censura pueden costarle caras en un servicio donde la comunidad lo es absolutamente todo.

Cada tanto surgen acusaciones de censura sobre Twitter, sobre todo en los Trending Topics, pero en todos los casos han sido causa de la desinformación sobre su funcionamiento y el hecho de que cuando un término está subiendo («trendeando») durante mucho tiempo, deja de ser Trending, como es lógico, y entonces sale de la lista de Trending Topics. Si no funcionase así, términos como «buenos días» o «café» serían trending topics continuamente.

Hasta ahora, Twitter siempre ha defendido a sus usuarios. No deberíamos olvidarnos en estos momentos que Twitter se resistió a entregar información sobre un usuario y presentó una moción en contra de la Fiscalía de Manhattan cuando ésta solicitó los datos de Malcom Harris, un activista que había participado en #OccupyWallStreet.

Sin embargo, la situación ahora no es la misma y el hecho clave de que Twitter haya cerrado un acuerdo estratégico con la NBC para cubrir estos Juegos Olímpicos da fuerza a las voces que hablan de censura.

Será interesante ver cómo una compañía que siempre ha defendido a su comunidad sobre jueces y gobiernos resuelve una petición de una empresa, justamente un medio de comunicación, que parece no haber tomado nada bien las críticas de un periodista en Los Ángeles, y si a esta hora no están redactando algo en su blog oficial, bien estaría que lo hiciesen pronto, antes de que #NBCfail deje de ser trending… O antes de que aparezca un nuevo hashtag con la palabra censura.

[Actualización] 31 de julio, 19:36

Twitter reestablece la cuenta de @guyadams, según sus propias palabras, explicándole en un email que han recibido un nuevo aviso de quienes se quejaron, quitando su solicitud inicial, por lo que la cuenta ha sido reestablecida. Ninguna disculpa o explicación por parte de Twitter más allá de esto.

Este artículo fue publicado originalmente por mí en ALT1040.

Internet, un espacio lleno de voz humana

Quienes hacemos uso de la comunicación en internet desde hace mucho tiempo tenemos incorporado un código inconsciente, una cultura de la libertad que no cuadra con el estilo formal y rebuscado de otros lenguajes, como las notas de prensa, los escritos formales o el tono de los relacionistas públicos.

Internet da un poder comunicativo a cada individuo en una dimensión nunca antes conocida, porque permite a todos conectarse de igual a igual, y es en este espacio donde la comunicación no puede ser de otra forma que personal, directa, conversacional. Hay una antena que todos tenemos para darnos cuenta si alguien nos está hablando de forma directa, de tú a tú. Parece simple, pero ha costado más de 10 años que esto sea entendido por muchas empresas y ejecutivos, relacionistas públicos y marcas, y aún así muchos parecen no terminar de encontrar la forma.

Nacida libre y abierta, Internet ha sido hasta ahora (y esperemos que lo siga siendo) un espacio lleno de la voz humana. Parte del entusiasmo con el que se participa en ella tiene relación con esto: con la gratificación que produce expresarse y escuchar a las personas auténticas que están del otro lado. Cada vez más gente participa de las redes, y las conversaciones adquieren una escala global.

El cambio que trae Internet a la comunicación y a la cultura es espectacular y ha hecho que hablemos muchas veces de revolución. La actitud reinante en la Red combina amplias dosis de humor, de inteligencia e ironía. Algo muy alejado de la superficialidad y vacuidad de las comunicaciones corporativas o de la pretendida objetividad periodística. Cuanto menos tardemos en comprender que la comunicación en Internet se halla impregnada de esa voz humana que habíamos perdido con años de marketing y gabinetes de prensa, más pronto empezaremos a disfrutar de la fiesta.

Este artículo fue publicado en el libro: 80 claves sobre el futuro del periodismo, de José Luis Orihuela.